Este 18 de agosto, KinoStartLAB dio paso a su versión 5.0 con una conversación entre el productor de cine y maestro, Juan Antonio de la Riva y el moderador, Erick Estrada.
Juan Antonio inició su participación hablando de su ingreso a la escuela del cine en 1975, como parte de la primera generación del Centro de Capacitación Cinematográfica, y dio un panorama de cómo se veía a la industria nacional en esos años.
“El cine mexicano no era bien visto en la escuela de cine. Es curioso, la escuala de cine mexicana no apreciaba a su propio cine”, mencionó Juan Antonio.
Para ejemplificar la visión que se tenía del cine mexicano es esa época, contó una anécdota con el director español Antonio Eceiza; que en ese tiempo era maestro de la institución educativa.
Eceiza, para conocer más sobre sus estudiantes, preguntó por los directores favoritos de los alumnos; a lo que Juan Antonio respondió que su favorito era Ismael Rodríguez, conocido por dirigir las películas de Pedro Infante. Sus compañeros se extrañaron por su respuesta, pues esperaban que mencionara a los grandes directores internacionales como ellos lo habían hecho.
Agregó que al ser muy nueva su escuela, esta no tenía un programa de estudios muy bien desarrollado; pero tuvo la fortuna de que justo al lado de la institución se encontraba el estudio Churubusco; donde entró como aprendiz de Jaime Humberto Hermosillo, durante la grabación de la película Matineé.
El trabajo de Juan Antonio gustó tanto que fue nuevamente llamado para ayudar en la filmación de la película Naufragio, donde mencionó que pudo aprender mucho más que en sus clases.
En la parte final de la charla se dio una breve, pero intensa reflexión sobre la última ola del nuevo cine mexicano; mencionando que, si se incrementa la producción de películas, el nuevo gran reto es cómo mejorar la calidad de ellas en cuestiones de historias.
Por: José Luis Hinojosa
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